Como habréis deducido del título el sexto día fue el más completo hasta ahora ya que me comí cuatro películas. La primera fue en la sala Tramuntana, la sala que intento evitar pero que realmente hay que reconocer que su sonido ha mejorado este año. Además es la única sala donde la gente de prensa estamos más cerca de la pantalla.
La segunda película fue en el Auditori y tuve la gran suerte de que me dejaron chafardear en la cabina de proyección. Ya sabéis que soy megafan de los cines y siempre que puedo ahí estoy para mirar. Menudas vistas hay desde arriba…
Poco más a destacar. La tercera cayó en el Retiro (como un Rey en la parte de arriba) y la cuarta otra vez en el Auditori con un Monster tamaño XXL en mano ya que era la primera del maratón Midnight X-Treme.
‘LA PIETÀ (LA PIEDAD)’, madres tóxicas en rosa chicle
¿QUIEN LA HACE Y QUIEN SALE? Detrás de ella está Eduardo Casanova, actor y cineasta que dirigió Pieles (2017). Está protagonizada por Ángela Molina, Manuel Llunell y Ana Polvorosa.
¿DE QUÉ VA? Una madre y su hijo tienen una relación de profunda dependencia que empezará a tornarse más oscura y tóxica cuando a uno de ellos le diagnostican una enfermedad mortal.
CRÍTICA | Tras esta segunda obra queda claro que Casanova hace un cine muy particular, visceral, que no es gusto de todo el mundo. De hecho, los que estamos acostumbrados al cine convencional nos costará conectar con ella.
A pesar de ello la historia está clara y queda muy remarcada esa maternidad dependiente, sobreprotectora y tan tóxica que pueden llegar a tener madres e hijos. El problema es que ese mensaje se repite en exceso y se pierde en su propio universo con metáforas dictatoriales o con una puesta en escena extravagante.
También hay ciertos planos que son muy potentes que conseguirán soltar murmullos en el patio de butacas. Si está lleno, claro. Pero para potentes el duo interpretativo de Molina y Llunell que adoptan a la perfección su relación maternofilial enfatizando el drama el extremo. Sin duda lo mejor de la cinta.
¿Pero… la película está bien? A ratos fascina y a ratos aburre. Se llega a hacer larga y para el tema que toca le quedaría mejor una duración de un cortometraje ya que el contenido sería más contundente y desgarrador de lo que ya es.
BALDÓMETRO: Regular (2,5/5)
‘EGO (HATCHING)’, de tal madre tal huevo
¿QUIEN LA HACE Y QUIEN SALE? Dirige la debutante finlandesa Hanna Bergholm y está protagonizada en gran parte por Siiri Solalinna y Sophia Heikkilä.
¿DE QUÉ VA? Una niña con una supuesta familia perfecta encontrará un huevo que poco a poco irá creciendo y que del cual saldrá una criatura con la que tendrá una extraña relaci´on.
CRÍTICA | Ésta es una fábula terrorífica que por suerte va de menos a más y que tiene temas jodidamente tan bien llevados como las frustraciones de los padres en los hijos y las falsas apariencias.
La historia peca de previsible en muchos momentos y podría tener más mala leche, pero su tratamiento del personaje intentando desesperadamente complacer a su madre obsesionada está retratada a la perfección. En temas de guión y con la actuación de la niña protagonista cuyas expresiones lo dicen todo.
El diseño de la criatura que sale del huevo es chocante al principio pero no sólo encajará bien con tensas apariciones, sino que será parte fundamental para un final tan resultón como arriesgado.
BALDÓMETRO: Buena (4/5)
‘EMERGENCY DECLARATION’, un virus que vuela muy alto
¿QUIEN LA HACE Y QUIEN SALE? Escribe y dirige Han Jae-rim, responsable de Rules of Dating (2005), The Face Reader (2013) y The King (2017). Está protagonizada por Song Kang-ho, Lee Byung-hun y Jeon Do-yeon.
¿DE QUÉ VA? Un avión comercial es objetivo de un ataque terrorista que liberará un devastador virus en el vuelo. Desde tierra un jefe de policía deberá retroceder los pasos del terrorista y encontrar así un antídoto.
CRÍTICA | Me imagino que el director habrá mamado de mucho thriller norteamericano porque su película reboza todos los elementos que funcionan destacando un gran pulso narrativo y una dirección sobresaliente.
Tanto es así que el hecho de ver como narra la historia a través de los diferentes personajes (con buen casting by the way) y el uso del ritmo y como lleva la tensión me ha recordado a los buenos tiempos de la serie 24, pero sin la pantalla dividida claro.
Su gran virtud es que desde los primeros minutos te mantiene pegado a la butaca con todo lo que está ocurriendo en pantalla, sobretodo gracias a lo que hace o deja de hacer el terrorista. Sin darte cuenta te metes en la historia y acabas sufriendo lo mismito que los pasajeros.
Lo único que hay que achacarle es su excesiva duración y que en la parte final tome demasiado protagonismo el drama social y los conflictos personales dejando que se evapore todo el suspense creado hasta entonces.
BALDÓMETRO: Buena (4/5)
‘H4Z4RD’, alocado roadtrip con música electro
¿QUIEN LA HACE Y QUIEN SALE? La dirige Jonas Govaerts, responsable de Cub (2014), y está protagonizada por Dimitri ‘Vegas’ Thivaios y Jeroen Perceval.
¿DE QUÉ VA? Un conductor y su sobrino recién salido de la cárcel se verán envueltos en un viaje en coche por la ciudad cuando un atraco organizado sale completamente mal.
CRÍTICA | Esta propuesta belga es un alucinógeno viaje a contrarrelejoj lleno humor, sangre y giros tan locos y rápidos como el Lexus chapado en oro del protagonista. Lástima que tienes a dos flipaos con los que no conectas. Es más, al copiloto le darías de tortas.
La gran mayoría de escenas son tan graciosas como surrealistas y en el conjunto funcionan; pero en cambio otras te pillarán a pie torcido y no sabrás que pensar. Eso se notará a medida que se acerque su abrupto y fantasioso final que no termina por encajar.
Por suerte no te aburres ya que la película tiene un montaje dinámico con los exitazos de música electrónica de los años 90 como el ‘Adagio For Strings’ de Tïësto o el clasicazo ‘Sandstorm’ de Darude, que directamente te recarga las pilas .
En lo técnico hay que comentar que prometía más en la forma que en el contenido ya que ni de lejos toda la película está grabado en cámara desde el interior del coche. Quizás me había llevado una impresión equivocada por el tráiler pero no destaca ni por el uso de la cámara en mano o del plano secuencia.
BALDÓMETRO: Regular (2,5/5)