El noveno día de festival empezó con la mala noticia de que la película sorpresa NO era ‘Silent Hill 2’. Un bajón que aumentó al descubrir que la premiere mundial sería de… ‘Paranormal Activity 4’. Además también veríamos dos películas nuevas: ‘Spring Breakers’, del director Harmony Korine, y ‘End of the Watch’, con Jake Gyllenhaal. Pero ya mañana…
Crítica de ‘The ABCs of Death’. Irregular antología sobre la muerte.
26 letras. 26 directores. 26 maneras de morir. La idea no puede ser más simple: a cada cineasta se la adjudica una letra, y se le da total libertad para crear un cortometraje en el que la muerte juegue un papel destacado. De esta manera, ‘The ABcs of Death’ construye una antología de cadáveres exquisitos, pero que, como todos los largometrajes creados a base de cortos peca de ser demasiado irregular.
De todos los cortos yo diría que son muy buenos unos 5 o 6, con lo que el nivel de los demás está entre medio y bajo. Eso sí, da igual la calidad del corto, todos y cada uno de ellos no te dejaran indiferentes por su temática o estética. Hay surrealismo japonés, stop-motion con plastelina, sci-fi, animación, dramas, cámaras lentas, cámaras subjetivas, sexo enfermizo, videoclips… A pesar de ser diferentes y estar en varios idiomas, lo bueno que tienen es que, ya sean malos o buenos, pasan en seguida al durar como mucho 5 minutos. Con lo que la propia película de 2 horas de duración no se hace larga.
¿Y los cortos qué? Bueno, muchos provocan, ofenden y estremecen (la sombra de ‘A Serbian Film’ aún es muy alargada), algunos divierten y entretienen (los de animación o los japones) y hay bastantes que aburren y pasan sin pena ni gloria… Hay de todo, pero ya digo, no se hacen pesados. Sin duda lo mejor es ir a verla con un grupo de amigotes y la mentalidad de pasar un rato experimentando con la muerte y también para poder ver a tantos directores haciendo lo que les da la real gana, que hoy en día eso no pasa.
Lo mejor: Unos 5 o 6 cortos encabezados por el de la letra D.
Lo peor: La mayoría son muy irregulares.
Puntuación: No está mal 3/5
Los directores Jake West, Noboru Iguchi, Adrián García Bogliano, Simon Rumley, Nacho Vigalondo, el productor Marc Walkow y el compositor Simon Boswell.
Crítica de ‘Seven Psychopaths’. Metacine y asesinos en serie.
Habemus premio del público. Obviamente aún no se sabe el palmarés oficial del festival, pero si tengo que juzgar por la sensación dejada en la sala y por la votaciones de la gente al salir de ella puedo aventurarme a decir que ‘Seven Psychopaths’ se lo va a llevar. Y con razón. Martin McDonagh se ha superado tras la cult movie moderna que era ‘Escondidos en Brujas’ y sencillamente ha parido una un cojonudo y descreido noir donde los asesinos en serie forman parte de una historia divertida, ágil y equilibrada.
Con un reparto magistral que nos engancha desde los primeros minutos en que aparecen en pantalla con sus alocados y desdibujados personajes (sí, hasta Colin Farrell), McDonagh parodia el mundo de hacer cine y de los gángsters con un magistral ejercicio de metacine que bebe de Tarantino en sus diálogos brillantes llenos de un humor negrísimo. Además la cinta hace una oportuna reflexión sobre el uso o no de la violencia. Sin duda una de las imprescindibles del festival.
Lo mejor: Lo diálogos ácidos y descarados interpretados por unos grandes actores.
Lo peor: El ritmo baja a mitad pero remonta al final.
Puntuación: 5/5 Muy buena
Crítica de ‘Sinister’. Algún susto efectivo y poco más.
Qué decepción con ‘Sinister’. De todos los días del festival no recuerdo ninguna película que haya salido decepcionado y que llegue al nivel de ésta. Se suponía que era la ‘Insidious’ de este año, pero nada más lejos de la realidad, se trata de una floja, fría y olvidable propuesta de terror con una historia de manual que he visto muchas veces. La gente busca algo más que sustos con música de estridente.
El director Scott Derrickson innova dejando un cuento de terror a la vieja usanza que mezcla demonios, el found footage con películas en Super 8 y una mirada sobre la infancia tremendamente perturbadora, que empieza correctamente, pero que luego acaba siendo de manual, llena de tópicos, sin fuerza ni chicha y con una historia que cansa.
Es cierto que en el fondo es lo que vende, porque tiene unos cuantos efectivos y simples sustos que hará levantar de la butaca a más de uno, pero debido a la cansina narración no te consigues meter en la película para estar en tensión o pasarlo mal. No se dan cuenta de que hay gente que busca algo más que el efectismo más barato de sustos con música a toda pastilla. Y si no eres así tranquilo, con ‘Sinister’ ya cumplirás tu cupo de terror barato para ver en una multisala.
Lo mejor: Los 3 o 4 sustos a lo largo del filme.
Lo peor: Pretende innovar pero acaba siendo como todas las demás. No te lo hace pasar mal.
Puntuación: 2/5 Mala
El director Scott Derrickson.
Maratón: La noche + Zombi
Tras el maratón Japan Madness del día anterior otra de las citas imprescidibles era el clásico maratón Zombi. Y al igual que con Japan Madness al final no me quedé a la tercera películas, así que «sólo» me vi la entretenida ‘Cockneys Vs Zombies’ y ‘Zombie Ass: Toilet of the Dead’, la otra ida de olla del director Noboru Iguchi.
Vamos con lo fácil. ‘Cockneys Vs Zombies’ es una copia bastarde de ‘Shaun of the Dead’ pero con más muertes y menos humor. Entretiene por su ritmo y sus personajes, pero tienen la sensación de que lo que estás viendo ya lo has visto muchas veces. Aún eso sí ya os digo, se deja ver.
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- El director Scott Derrickson.
Lo bueno venía después. Noboru Iguchi vuelve a sorprendernos (tras volver a hacer de showman en la presentación) una trabajo suyo demencial. ‘Zombie Ass: Toilet of the Dead’ nos narra como un padre, científico loco, en un desesperado intento por salvar a su hija enferma, termina creando una nueva raza de pequeños monstruos, cuyos huevos quedan implantados en el interior del cuerpo humano. Y cuando los bichos nacen… ahí empieza lo bueno. Una cinta que es aún más de demencial y loca de lo que aparente a simple vista.
Eso sí, al contario que ‘Dead Sushi’, esta cinta empieza con una factura seria y con poco humor. Se nos presentará a los personajes y no será hasta la primera aparición de un zombie surgido de las profundidades de la mierda que no se irá de madre. Escatológica, nauseabunda, e hilarante, la película hace uso de la efectividad primaria y grosera al que nos tiene acostumbrados el director para jugar con primeros planos de culos, de tetas, de pedos con sangre, nubes de gas o propulsores, de gusanos que entran y salen por cualquier orificio, del gore más asqueroso… No tiene desperdicio.
Iguchi volviendo a seducir al público con su personalidad de showman.