¿Cómo puede una señora conocer tan bien el mundo de los niños cuando hace mucho que dejó de serlo? Esta frase la lee una Astrid Lindgren ya mayor en una de las muchas cartas que recibe de sus pequeños admiradores, a partir de aquí nos trasladamos a los años 20 en la Suecia de la Astrid adolescente, mucho antes de dedicarse a escribir.
Astrid, una magnífica Alba August, vive con su familia en un ambiente tradicional y religioso, sus hermanos siempre le reclaman oír uno de sus cuentos e invenciones y pronto empezará a trabajar en el periódico local. Se quedará embarazada de su jefe que está en trámites de divorcio. Toda esta mezcla de elementos harán que Astrid viva seguramente los años más complicados de su vida en los que se centra toda la película.
No se nombra en ningún momento a su personaje más conocido, Pippi Langstrum, aunque podemos reconocerla en la personalidad de Astrid; solo en un guiño se nombra de pasada a un tal señor Nilsson. Aún con todo en contra, Astrid se mantiene independiente y lucha por seguir adelante, estudiar, encontrar trabajo, vivienda y poder conservar a su hijo. En gran parte gracias a la generosidad de extraños y sobretodo a su tenacidad.
Drama histórico biográfico contado por Pernille Fischer Christensen de una manera optimista y nada lacrimógena. Un relato pausado y elegante de los años que marcaron a una de las escritoras más leídas en la literatura infantil.
Lo mejor: Conocer parte de la vida de esta escritora y Alba August.
Lo peor: Que puede parecer un poco convencional.
Nota: 3/5