Ya sé que siempre hago las crónicas separando los días pero entended que esta edición yendo como público es inusual. Así que me puedo tomar la libertad de juntar unos cuantos días porque lo de ir en tren para una sola película y luego volver pues… como que sabe a poco. Y hasta molesta.
ARCADIAN: Drama de supervivencia muy correcto que bebe mucho de ‘Un lugar tranquilo’. Sienta bien las bases, el reparto está creíble (tanto los jóvenes como un Nicolas Cage contenido) y farda de tener unos buenos momentos muy potentes. Y oye, el diseño de los bichos mola. CGI regulero, eso sí.
SEW TORN: Thriller que si entras en el rollo MacGyver costurero de su protagonista y su tono ambiguo no te descoloca, disfrutarás de ella. No inventa nada en su narración pero la historia está muy bien hilada (chist) y el último tercio compensa de sobras su visionado. Con una prota más carismática y un desarrollo con más mala leche, ganaría puntos.
CUCKOO: Terror sobrenatural cuya mejor baza es la atmósfera opresiva y la intensidad de su protagonista, la actriz Hunter Schafer, que logra sostener el interés por la película. Lo malo es que el misterio se alarga en exceso, la criatura roza lo ridículo y su potencial dista de su resolución.
AZRAEL: Frustrante survival horror que te hará perder la paciencia con una historia postapocalíptica religiosa que hace aguas. La falta de diálogos le pasa factura al ritmo y a pesar de los sangrientos encuentros de Samara Weaving molan, éstos llegan tarde y carecen de interés. ¿El colmo? No sorprende.
DEADMAIL: Thriller que tiene problemas de ritmo, se hace larga y la estructura está descompensada; pero su tremendo reparto te hace olvidar lo malo. Más que una investigación criminal a lo Zodiac, es un «cómo conocer y entender» al secuestrador. El look granulado a lo 35mm y una música de sintetizador omnipresente ayuda a entrar en ella y a respirar una atmósfera retro constante.
ESCAPE FROM 21ST CENTURY: Locura china sin complejos donde el ritmo, el montaje, la música, la mezcla de animación con acción real, los FXs exagerados y sus toques de humor absurdo tejen una historia de amistad, amor y decisiones de juventud que pasa VOLANDO. Tiene corazón y alma, pero a más de uno necesitará un ibuprofeno después de verla.
STRANGE DARLING: Thriller que te atrapa y no te suelta desde los créditos por su narración fragmentada, su forma de jugar con el espectador, su dirección medida y el tremebundo trabajo actoral de la protagonista. Se notan los 35mm que lucen de maravilla sobretodo en un aspecto visual saturado de colores que alegra la vista.